Metáforas del camino al doctorado


En la introducción de mi participación, Las cibercomunidades de aprendizaje (cCA): se hace camino al andar, me referiré a algunas metáforas o comparaciones que se me ocurrían en ese camino.

Así, en una primera ocasión, pensé que se parecía a una montaña rusa. Había veces que subías lentamente, casi parado, y en otras en las que ibas lanzado, casi con vértigo. Podías ir solo o ir en compañía; en ocasiones disfrutabas y en otra deseabas (y pensabas) bajarte. Pero la comparación no era tan buena si lo pensaba mejor: no había un circuito (tan) prefijado, preparado y controlado por alguien para ti.

En una segunda comparación, me iba a la subida al monte, afición tan extendida por estos lares, y de la que es exponente Eztabai, por ejemplo. Vas haciendo camino al andar, hay subidas y bajadas, más o menos acusadas, puedes ir acompañado aunque el ritmo te lo acabas marcando tú, a veces hay que tomar elecciones que condicionan el camino a seguir, no siempre está indicado ese camino y puedes tomar decisiones equivocadas pese a que vayas bien equipado... Incluso se puede disfrutar, y de hecho se hace.

En la tercera, iba un poco más allá. Porque ese subir al monte del doctorado es un poco especial, es la "subida de nuestra vida" por decirlo de alguna manera, un top, un 8000, el Everest probablemente. Incluso hay quien tiene más de un doctorado y repite, pero no suele ser lo más habitual. Es una ascensión exigente, para la que hay que prepararse antes y tomar muchas decisiones, en las que hay sherpas pero al final depende de uno mismo. Suelen hacerse novedades, en cuanto al estilo, a la vía, al momento del año para subir... más o menos, como pasa en el camino al doctorado. Y es posible subir y hollar la cima, aunque haya quien se quede por el camino o se dé la vuelta.



Aprovecho para felicitar, como hice en Twitter, al recién doctorado Jorge Oceja y a la también reciente doctora Sonia Martínez Requejo, compañeros en el inicio de esta aventura doctoral , allá por los comienzos de siglo en la UNED.

Comentarios

  1. Metáforas muy acertadas, Iñaki. Las comparto. No sé si me quedaría solo con una, porque el camino es largo y da para vivirlo de diversas maneras. Lo importante, para mí, es marcarse bien el objetivo (ya sea subir a la montaña rusa, al monte de al lado de casa o al 8000): el objetivo claro es el único que nos ayuda a seguir adelante. Zorionak una vez más por todo el trabajo realizado: a ti, a todas las personas doctoras y a todas las que lo intentaron, a pesar de quedarse en el camino.

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  2. Tal cual...
    Gracias por ser mi sherpa en esta ocasión.

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    1. Y si hace falta, María, compañero de cordada ;-)

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