Clasificando universidades

A nada que hayas leído un poco entradas en este humilde blogsito, sabrás que soy, como suelo llamarlo, "producto UNED", puesto que  me licencié en esta universidad y, tras un viaje un poco largo debido seguramente que no estás dedicado a la investigación en un entorno académico a tiempo completo, también me doctoré. El otro día me comentó un amigo que esta universidad no quedaba muy bien en la clasificación de universidades, lo que me hizo dar un par de vueltas a las clasificaciones de organizaciones educativa y las posibles influencias.



Empecé a buscar en Internet para conocer un poco más de esa clasificación y llegué a un Ranking de las universidades españolas y también a la nota de prensa correspondiente, si bien no toda la prensa se había hecho eco, tal vez por la sobredosis de información electoral.  

Primer dato (o factor concurrente, si así prefieres). Tras el trabajo, está la Fundación BBVA. He seguido curioseando y, en efecto, he confirmado el comentario del amigo: la UNED está bastante atrás, sí. De todas formas, en ese tipo de rankings (y en otros, por supuesto, como cuando se afirma que Bilbao es una de las ciudades más limpias) creo que es fundamental fijarse en los indicadores utilizados y los términos de comparación (esto me recuerda a la asignatura de "Educación comparada" que tuve que cursar). En este caso los han publicado de manera expresa. Eso sí, poco tienen que ver con, pongamos por caso, los criterios de calidad que hacen que un colegio sea mejor que otro publicados por Luis Lizasoain en The Conversation.

Es posible que mi proceso en la UNED no sea de lo más habitual (sin falsa modestia diría que estoy entre los y las estudiantes de éxito). Pero te aseguro que no regalan nada; al menos, conmigo no lo hicieron, sin que con esto quiera sugerir que en otros lugares se haga. Te pondré un ejemplo; años después de acabar, comenté a una profesora la dificultad de los trabajos que nos había enviado, trabajos de investigación de un alto nivel y con poca ayuda para realizarlos. "Pero, ¿aprendiste?" me respondió. Admití que sí, pero le insistí en la gran dificultad de lo que nos había planteado. 

Resumo. No me parece que sea sencillo simplificar realidades complejas. Es más: no es mala costumbre leer más allá de los titulares. Por otra parte, me ha llamado la atención que tampoco ande muy lejos en el ranking la UOC. Da que pensar que tal vez falte fijarse en las características del alumnado, y además en el de quien estudia a distancia. Cantaba Xabi Aburruzaga "errua ez da distantziarena", la culpa no es de la distancia, pero en este caso...

Acabo. En la entrada en euskera sobre este tema en Ikasle eta irakasle ha comentado alguien que conoce bien el mundo de la UNED, como es Vicente Huici, que los egresados por esta universidad están, en todo caso, bien valorados. Amén.

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