Fama y lana / Izena eta izana
Lehengoan blog honen izenburua gustatu zitzaiola adierazi zidan Ikasbloggersen saioan zegoenetako batek. Esan nion bezalaxe, ez nuen gehiegi pentsatu.
Dena den, lagun on baten ustetan behintzat, bilbotar batek izan beharko lukeen ustezko profila nahiko zuzen betetzen omen dut. Hala, HABE aldizkarian bilbokoen hizkerari buruzko artikulu bat argitaratu aurretik, erantzuteko aukera eman zidaten; jatorrizkoa, "dame un musuchu, nesca" Goizalde Landabasok idatzi zuen. Neuk idatzitakoaren izenburua ingeleraz dago, baina hori baino ez: "to be or not to be". Irakurri duen batek baino gehiagok jakinarazi dit haserrea dariola, eta hala izango da, nahiz eta leuntzen saiatu nintzen ;-) Zeure iritzia eman nahi baduzu...
Dena den, lagun on baten ustetan behintzat, bilbotar batek izan beharko lukeen ustezko profila nahiko zuzen betetzen omen dut. Hala, HABE aldizkarian bilbokoen hizkerari buruzko artikulu bat argitaratu aurretik, erantzuteko aukera eman zidaten; jatorrizkoa, "dame un musuchu, nesca" Goizalde Landabasok idatzi zuen. Neuk idatzitakoaren izenburua ingeleraz dago, baina hori baino ez: "to be or not to be". Irakurri duen batek baino gehiagok jakinarazi dit haserrea dariola, eta hala izango da, nahiz eta leuntzen saiatu nintzen ;-) Zeure iritzia eman nahi baduzu...
El otro día me comentó uno de los asistentes a Ikasbloggers que le gustaba el nombre de este blog. Lo cierto, como le comenté, es que no lo pensé demasiado, aunque está claro que el Botxo me tira. De hecho, según algún buen amigo, cumplo con los parámetros que se le presuponen a un bilbaino. Y debe ser más evidente de lo que supongo, ya que que hace unos años, allá por 2002, iban a publicar un artículo sobre el lexicón bilbaino en la revista HABE, y debió parecer a las responsables un tanto excesivo, por lo que me pidieron un artículo de respuesta, publicado en el mismo número. Eso sí, pese a su título, "to be or not to be", si quieres leerlo está en euskera. Personas que lo han leído me han dicho que se percibe mi enfado. Y eso que me moderé y autocensuré un poco ;-)
Jo Iñaki, que mala leche destila tu respuesta. Leyendo el texto que la ha provocado no me parece que sea para tanto. Son distintas perspectivas. Hasta los dieciseis años yo sólo iba a Bilbao al médico y a Begoña el día de la Virgen y mi visión de vosotros no era la que dicta el tópico. Lo que yo veía era un mundo castellanoparlante, tan distinto al mío euskaldun y tan grande y con tantos coches y tantas corbatas, que me asombraba cuando algún tendero de las Siete Calles me hablaba en euskera.
ResponderEliminarTuve que ir a vivir a Donostia para enterarme de que los bilbainos sois unos chulos y unos prepotentes. Incluso para enterarme de que eramos bilbainos todos los que vivíamos más allá de Eibar, ya ves tú.
Y a mi que los bilbainos me parecían gente distinta pero maja, sobre todo porque eran todos del Athletic...
Cuánto daño nos hacemos a nosotros mismos jugando a esos localismos que algunos tan bien están atizando
Supongo que te referirás al artículo, Juan Carlos. Mi cabreo fue enorme, y aún hoy me sigue mosqueando. Con todo, me contuve y modalicé mi respuesta, o sea, imagínate cómo eran las primeras versiones jeje.
ResponderEliminarEn cuanto a valorar el artículo previo, supongo que será cómo hemos vivido esas situaciones. Con todo, insisto en que las responsables (guipuzcoanas, por cierto) me invitaron a contestar. Y pienso que el tema del lexicón daba para otros enfoques.
De todos modos, coincido con tu reflexión final. Un poco de broma y el toque de ironía no están mal, pero los tópicos mal tratados son TNT en potencia, y no de marca ACME precisamente.
Por cierto, aunque no sé si muchos, existimos chimbos euskaldunes nacidos en los 60 ;-)