La buena educación y el conocimiento del mundo
Hace no mucho escribí por aquí sobre la "buena" educación . Según publiqué la entrada recordé una situación que viví como enseñante, una anécdora de cuando daba clases de euskera a personas adultas a diario. Aquel curso tenía un alumno digamos que un poco especial. Vale, todos somos un poco especiales, pero aquel en concreto tenía "su puntillo". Te pongo un ejemplo. Cuando le decía que sus redacciones eran difíciles de entender, me respondía que el problema era la falta de cultura de los y las docentes, por lo menos mía y de mis compañeros. Dicho de otra manera, a su juicio sus redacciones eran buenas y teníamos un problema de nivel cultural (o de conocimiento del mundo, vete tú a saber) para entenderlas. Un día, según habíamos vuelto del rato de descanso y retomábamos la actividad, sacó un plátano, lo peló y empezó a comerlo. Puedes imaginarte mi mosqueo. Le indiqué que era una falta de respeto hacia mí y hacia el resto de colegas aprendientes, pero el lo...