#Botxotik10 Gorka Fernández


Elvis está vivo, me lo ha dicho un amigo
Desconozco si Elvis está vivo o muerto, pero tengo la certeza de que los blogs están muy vivos, obviamente no es lo mismo que en 2007 cuando nacía esta bitácora digital. Entonces predominaba mucho más la palabra, la reflexión, el debate en los comentarios… Todo está dicho sobre lo que antes era la blogosfera. La evolución bloguera nos ha llevado a un momento más audiovisual y... monetizado. Escuché a alguien decir que si por cada vez que escuchara el concepto monetizar en una cena le diesen un chupito no llegaba a los postres sin tambalearse. Se oye mucho hablar de monetización de recursos on line. 

Actualmente una de las características que quizá hace diez años no estaba tan explotada es la de ganar dinero con un blog, muchas páginas de marketing digital lo plantean como opción. 

Más allá de este detalle en el blog sigue perdurando un romanticismo y filantropía del conocimiento que no morirá por mucha monetización que medie.

Me gusta mucho el post de Juan Francisco Álvarez escrito en su blog personal de reflexión educativa, en el que plantea que, pongamos después de diez años: 
  • sigue habiendo muchos blogs que siguen ahí, aportando (este por ejemplo, el de Mikel Agirregabiria, Toni Solano, nuestro querido Tres Tizas…) cada blog tiene también su propia evolución, yo inicié uno en junio de 2007 (somos de la misma promoción;) como blog de aula y ha acabado siendo útil para publicar los diferentes podcast que realizo; 
  • han aparecido con fuerza nuevos blogs, con ilusión (el del José Blas, Enrique Sánchez…); 
  • los aprendizajes que en los blogs se vierten hoy en día son más directos, más concisos y más visuales también; 
  • podría decirse que el contenido de muchos de ellos es ahora más maduro, más inteligente, bien documentado y mejor elaborado y cómo no, 
  • se han convertido en una herramienta de aprendizaje de evidente eficacia.

Además sigue existiendo cierta idea de pertenencia de clase. Me siguen emocionando las entregas de peonzas en los premios anuales del blogs educativos de la asociación Espiral. Veo cada junio como hay una pulsión común, una certidumbre de que tener un blog es algo singular, que precisa una sistematicidad, trabajo y dedicación. Cuando veo cómo ese esfuerzo se recompensa con el reconomiento de la comunidad (¿cibercomunidad quizá mejor? ;) me emociono. Sigue habiendo armonía bloguera, colaboración, si no… ¿cómo iba yo a estar escribiendo en este blog?

Feliz década Iñaki, no pierdas la esencia, ni tú como creador, ni tu espacio como medio.

Un abrazo.

Comentarios

  1. Está claro, Gorka, que el barrio blogosférico sigue vivo, dentro de esa aldea global. Algo cambiado en estos diez años, tal vez, pero vivo.

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