Nekaj dni v avgustu v Sloveniji
Que me perdone quien sepa, o entienda al menos, esloveno. He tirado para el título del traductor de Google, tal y como hemos hecho este año cuando hemos pasado "algunos días de agosto en Eslovenia".
Así que recojo algunos apuntes e ideas, incluso alguna propina digital, completando esa serie de "Guía Murua" (a veces sé que se ha pasado alguna parte a otros clientes de Noma Bidaiak, jeje). Ah, si te interesa algún sitio de los que haya visitado, tengo algunos documentos que puedo compartir, además de estas entradas.
- Apuntes de tipo general:
- El país, amigable en general. Con ambientes distintos que hemos podido conocer un poco: la capital, la zona de lagos (Bled, Bohinj) y Alpes, la zona costera. Y turismo en todas partes.
- A la ida, en coche desde Italia, sorpresas: atascos en la autopista (el viaje se alargó), mucho jaleo en la frontera (hay que comprar un pase para circular por el país, pero ya no se compra en las gasolineras cerca de la frontera, sino que el proceso es online; la gasolina más barata que en Italia así que colas para repostar...).
- Mucho ciclista, en ciudades y carreteras. Igual ayuda el fenómeno de los campeones que tienen ahora (Pogacar, Roglic). Pero algunos muy globeros, y casi peligrosos en carretera por el poco control de la bici.
- Aparcar... caro. Y WC también. Precio unitario de 50 cm. (solo encontré un baño público gratuito en los diez días)
- Calidad del agua del grifo... aunque no siempre la sirvan de buena gana en restaurantes.
- Muchos mosquitos e insectos... con el peligro que para mí tiene. Alguna picadura ya me ha caído, claro, pese a las precauciones.
- Poca policía (al menos, a la vista y de modo reconocible). Pero he visto en un caso poner multas por mal aparcamiento en carretera (supongo que por ahorrar el aparcamiento).
- Ojo con los horarios (de comidas y cenas, por ejemplo) y con establecimientos que cierran los domingos.
- Ljubljana, la capital
- El centro, lo turistico, abarcable y visitable en no mucho tiempo. Ayuda que mucho sea peatonal (pero ojo con las bicis).
- Mucha hostelería, en los márgenes del río sobre todo.
- Pero luego, si te alejas, sorpresas: ¡menuda estación de autobuses! (la antigua Termibús bilbaina sería de cinco estrellas en comparación).
- Curiosa la visita a Metelkova, el barrio alternativo.
- El Mercado más parecía un mercadillo. Y las avispas, abejas, insectos varios en los puestos de fruta... Claro que quienes vendían, como si nada.
- Muchos grafitis.
- Alguna mala praxis hostelera (no voy a decir el restaurante, muy bien valorado en las guías e incluso recomendado por amigos): precios más ajustados pero al llegar la cuenta te indican que el servicio no está incluido y el camarero ni te mira si no dejas una propina "estilo Nueva York".
- De camino, merece un alto para visitar una ciudad medieva bien conservada: Škofja Loka.
- Lago Bled
- Como dicen, muy de postal. Mucho turismo. Y algunas edificaciones que fastidian la vista (esos hoteles que, intuyo, serán de los tiempos yugoslavos).
- ¡Menudo ejercicio hacen quienes reman y llevan a las y los turistas en las barquitas tradicionales!
- Ojo con los atascos.
- Lago Bohinj y entorno del parque nacional de Triglav.
- Más cuidado (supongo que lo de ser parque ayuda).
- Posibilidad de rutas a pie interesantes, además de las típicas, como la de la cascada de Savica.
- De camino, vimos de lejos el castillo de Predjama y ni nos atrevimos a entra a las cuevas de Postonja, por la cantidad de gente que había.
- Costa
- Apenas 40 km., explotados a tope.
- Piran, bonito. Portiroz, un destino turístico más (no sabrías decir en qué país estás).
- Salvo alguna excepción, alto nivel de privatización en playas y cerca de la costa, con castas definidas: residentes en hotel / urbanizaciones, quienes pagan hamaca y/o sombrilla, quienes hacen lo que pueden.
- Por cierto, lo de la privatización y las castas en las orillas también lo vi en Bled.
Algunas propinas digitales (que siempre caen):
- Kavarna Rog, en Ljubljana. Desayunos de campeones, por ejemplo, aunque va cambiando de estilo según las horas.
- Das ist Valter, en Lubljana. Barato, para comidas informales y tomarse alguna birra local (creo que es alguna franquicia).
- Ostarija Plegez'n, en Bled. Buenas raciones, a destacar los arroces. Servicio atento. Interesante reservar, por la gente que suele haber.
- Restaravcija Central, en Bled. Tiene la cocina abierta todo el día, lo que hace que pueda ser interesante según el plan. El camarero un poco seta al principio, pero sabía que existe el Athletic de Bilbao.
- Apartament Resturant Ukanc. No hay mucha oferta por allí, y es potable para pizzas, burgers...
- Beli Kriz, en Portoroz (carretera hacia Piran) Mucha gente siempre. Al lado de la carretera, pinta más tasca al entrar, con algún parroquiano sentado fuera. Tienen terraza exterior. Gente amable, aunque a veces se pueden liar. Muy bien de relación calidad-precio.
- Cafinho. Terraza en Piran, con vista al mar; .hecho, dicen que la puesta de sol es excelente desde allí. Al precio normal en la zona pero con atractivo, y mucha opción en cervezas).
- Rostelin; en Piran. Para comer pasta; la hacen en la tienda de al lado y se ve por el escaparate. Muy bonito por dentro, para mi gusto.
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