Pensando un poco sobre tecnologías en el aula

Leía este tuit vía Aarón Pérez

"La mejor tecnología es la tiza y la pizarra“ @vruizt #ICHHJornada pic.twitter.com/ry1vTbEquc

— Pepa Montava Navarro (@PepaMontava) 24 de marzo de 2018

Cierto es que me gusta el dibujo del gran Potachov (de Moldavia), y que algunas personas meten cacharrería para seguir haciendo lo mismo de siempre. También es cierto que, aunque no siempre se sea consciente, la tiza y la pizarra también son tecnologías, claro que en este caso puede funcionar aquello que le oí y leí a Genís Roca, pero que  él se la atribuye a Alan Kay del MIT: 

“una tecnología sólo es tecnología si tu naciste antes que ella”

Y, si pensamos en que una de las cuestiones es el uso que damos a la tecnología, como se dice del cuchillo, recuerdo a más de un docente que utilizaba la tiza (o incluso el borrador, llegado el caso) como proyectil para despertar al alumnado despistado (y entonces no había pantallas o artefactos que  promoviesen el despiste, añado).

srgpicker en Flickr

De ahí que no esté de acuerdo en que la tiza y la pizarra sean la mejor tecnología (que algunas incluso manchan, aunque yo era de los de portatizas, tizas de colores que dejaban menos polvo...). La mejor será la más adecuada al contexto, los objetivos de enseñanza y aprendizaje, las necesidades, los conocimientos y capacidades de docentes y discentes, la metodología... En definitiva: que hay que matizar bastante más qué es eso de la mejor y la peor. 

Y ahí andamos, con peores y mejores tecnologías, cuando el prolífero Jordi Martí, aka @xarxatic, ha escrito en su blog recientemente que el iPad es el peor dispositivo tecnológico para ser usado en el aula, mientras que otro prolífero como el recién jubilado Mikel Agirregabiria tuiteaba que Apple quiere conquistar las aulas con iPad más baratos.

De la cacharrería, me remito a párrafos anteriores. De los iPad, poco puedo decir de mi experiencia porque no soy usuario. De su uso sí tengo alguna anécdota, de segunda mano que no vivida en primera persona. Y es que cierto centro público de secundaria tuvo la "posibilidad" de elegir al alumnado para una nueva experiencia; además, tenían que comprarse una tableta, de un modelo determinado. Supongo que cuando se evalúe la experiencia (si es que algún día se hace), el uso del iPad sea tenido más como factor concurrente que como causa cierta de la mejora si es que existe... después de que se haya elegido al mejor alumnado. De todas maneras, comprar un coche de fórmula 1 o de alta gama (léase equipo chupiguay) para tenerlo sin gasolina o en el garaje (como apunta Jordi para entrar en el Moodle del centro, o totalmente capado, que a ver si a la chavalería le da por trastear donde no corresponde) no lo entiendo.

Vale. Tal vez siga en modo rezongón. Aunque ya escribía en 2014 sobre "nuevas" tecnologías.