¿Explotará la burbuja del fútbol?

Por aquello de lanzar la idea, que luego se va madurando,  escribí un tuit sobre si la burbuja futbolística será la siguiente en explotar, tras la inmobiliaria. Esta noticia sobre futbolistas en paro la leí con posterioridad, pero me reafirma en la duda planteada. La cuestión es que quizás entre todos estén matando a una gallina que ha venido dando huevos cuando menos de plata, si no de oro. Porque, aún sin fútbol de categorías superiores, el sol sigue saliendo al comenzar la semana siguiente.

editmbx en Flickr

No es que me parezca mal que los futbolistas  quieran que se respeten sus derechos y estén dispuestos a ir a la huelga, que tampoco todos son millonarios en calzoncillos, como los define Eztabai, aunque resulte una huelga sui géneris (muchos siguen entrenando, el sindicato pide que no haya descuentos, no paran todas las categorías...) Considero que si los "sindicalistas millonarios" quieren ser solidarios con sus compañeros podrían crear una especie de fondo o caja de resistencia propia; es posible que con un mínimo porcentaje de unos cuantos de quienes aparecieron en la rueda de prensa de la convocatoria... Aunque también me asalta la duda de qué piensa el jugador a quien ofrecen "el oro y el moro" y/o que ficha por un equipo que se ha venido caracterizando por no pagar o hacerlo de mala manera.

Por otra parte, estoy de acuerdo con la queja de algún club modesto, que se ha rebelado contra esos fondos para pagar "alegrías ajenas". Además, no olvidemos que los clubs tienen más deudas que los impagos a sus jugadores; ¿cuánto deben a Hacienda y a la Seguridad Social, por ejemplo? (en febrero se publicaba que 600 millones)

Se ha perdido el norte. Un ejemplo, revelador a mi juicio, del rasero que se utiliza en el mundillo. Aitor Ocio señalaba en una entrevista que había firmado la renovación en unos parámetros ajustados, una tercera parte de la ficha anterior. Vale, no es la bajada del 4% como media que se realizó en las remuneraciones del funcionariado, pero ¿de qué montantes estamos hablando? Con frecuencia se señala el grado de profesionalización en la 2ª B, pero ¿es asumible, más aún, en un contexto de crisis? Se pensó que con crear sociedades anónimas deportivas se solucionaría, pero a la vista está que no. Y ya no existe ese recurso, tan unido a la burbuja inmobiliaria, de la recalificación de terrenos como forma de cubrir deudas pasadas y disponer de dinero para nuevas aventuras. El problema es querer vivir por encima de las posibilidades, algo que, me parece, sucede a todos los niveles, incluso en categorías regionales. En clubs y en personas del mundillo, jugadores, representantes... Así nos va.