Regreso al pasado

Claro, después de haber vivido en la Euskadi 5.0...

Como quiera que bastantes fotos y vídeos pululan por la Red, voy con algunas consideraciones, aunque seguro que saldrá algún otro post más, a medida que vaya dándole un par de vueltas más al asunto.  También aclarar que no he asistido a las sesiones de las mañanas, con lo cual, además de no poder saludar a Latxaga, me he perdido en directo algunas de las intervenciones.

En ocasiones, he tenido la sensación de estar con un telescopio observando a algunas de las estrellas del firmamento blogero hispano. Y al tratar de acercarte a verlas más de cerca, se mantenían todavía distantes. El peso femenino sobre el estrado escaso; también el de bloggers de la "cantera",  micropresentaciones al margen.

Y es que, tal y como apuntó un participante en la amena comida (no oficial) del viernes,  el evento podía estar desarrollándose en cualquier otro lugar y del mismo modo. Por otra parte, como esta previsto, apenas espacio para el euskera en el aspecto oficial. En el oficial, porque sí que hubo tuiteos en esta lengua, incluso de gente crítica con el evento. Es más, se llegó a plantear la pregunta de si hay dos blogosferas, aunque la respuesta resultara descafeinada.

He observado cierta relación dialéctica entre lo que supone la Red, los blogs... con los patrocinadores, que son desde luego muy del mundo "real". No deja de sorprender que haya personas conocidas que te comenten que saben de tu presencia por la foto publicada en la versión papel del Correo, al tiempo que te has enterado por twitter de que esa foto ha sido publicada.  También otras dialécticas entre medios  de comunicación tradicionales y nuevas formas, entre amateurs que alcanzan el éxito frente a quienes se han preparado para ser "atletas de élite" (entiéndase comunicadores). Probablemente, cada cual defienda lo suyo.

Me ha parecido que no siempre se ha tenido en cuenta a la audiencia; por ejemplo, cuando en la sala la gran mayoría tiene blog y participa en redes sociales, que se explique la diferencia entre web 1.0 y 2.0 no sé si es muy procedente. O que los miembros de una mesa lancen sus monólogos, sin apenas diálogo. En este sentido, destacar, a mi juicio, la acritud de Amatiño; puedo entender que esté de vuelta de todo esto aunque mantenga blogs, pero podía haber matizado su postura y comentarios.  

Pienso que éxito para la organización (no ha faltado un punto de lógico autobombo) que posiblemente dé paso a otros encuentros. En los que espero se abra paso a más temas, además del periodismo. Ah, y que no falten entonces las relaciones informales y el "desvirtualizar". Por cierto, twitter parece que gorjea con fuerza.