Gonzalo Garrido, La capital del mundo: mi reseña crítica

Prometí el día de la presentación de la primera edición de #LaCapitalDelMundo que habría crítica bloguera cuando lo acabara (también tengo pendiente una conversación con Gonzalo). Y llega justo antes de la presentación de la segunda edición, (pasado mañana,  día de San Juan, en Librería Cámara a las 19:30), que el libro está teniendo buena acogida. Intentaré pasar a limpio mis impresiones, aunque el autor ya me haya dicho que en sucio iría más acorde con el personaje protagonista... y sin destripar la trama argumental. Vamos, como dirían personas muy "modelnas", sin spoilear.

Si tuviera que hacer una reseña telegráfica diría (es que voy pillado de tiempo últimamente): 
sorprendente (stop)
regusto final amargo (stop)
¿y si no fuera todo tan ficción como dice? (stop)
crítica social, más allá de novela negra (stop)
me ha gustado (stop).


Alarguemos un poco. En todo caso, no creo que sea una novela negra al uso. Engancha y exige que tomes prestado tiempo de donde no tienes para acabar, pero, aún así, Gonzalo Garrido mete puyas a casi todo lo que se mueve en el entorno, incluida la autoestima (y el punto de autosuficiencia) bilbaina. En un comentario en Facebook creo que leí que se metía con unas 20 profesiones distintas; no las he contado, pero lejos no andará.  Y no solo las profesiones, o los y las profesionales también. ¿Se salva alguien? Diría que una persona en toda la novela. Bueno, tal vez tal vez, lo único que no aparece es el tema de las lenguas y la política lingüística... por la parte que me toca. (A saber si no he dado argumento para una próxima novela... negra). Como bilbaino no me ha afectado, la verdad; pero no sé si todas las posibles personas aludidas pensarán lo mismo.

El estilo del autor se percibe, o, al menos, lo percibo yo, en algunos aspectos. La doble voz narrativa (hasta aquí puedo leer) que, con lógicas diferencias, aparece también en "El patio inglés", la crítica social que ya mencionaba antes. Por otra parte, la sensación de "y si lo que me cuenta no fuera tan ficción" ya me sucedió en "Las flores de Baudelaire". Asoma también un punto de humor, que no recuerdo yo en las otras dos novelas sin embargo.

Un punto discutible al menos: para quienes no conozcan mucho Bilbao, quizá las referencias socioculturales y geográficas hagan que se complique un poco la comprensión de la novela; los txinbos no creo que aquí puedan objetar mucho. 

Se decia que la Villa de Don Diego era buen escenario para la novela y la película negra. Creo que el viernes algo dirán sobre lo negro y el Botxo... porque quizá, también en este aspecto, quepa decir "ay Bilbao, cómo has cambiao". ¿O siempre nos quedará nuestra vertiente de "Ricardo Malpartida"?


Comentarios