Casi rojiblanca

Pucela fue casi rojiblanca. Casi escribo, por aquello del partido en viernes noche, que si llega a ser en otro momento... Y es que, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, o sea, que había otro compromiso deportivo bilbaino-vallisoletano el fin de semana y se habla del buen ambiente y trato allí, la libreta forofogoitia acompañó a su dueño hasta el José Zorrilla.

De la web oficial del Athletic
Menuda broma a la entrada. Parece que no funcionaban bien los tornos en una de las puertas de acceso al campo de fútbol; seguro que adivinas en cuál. Aderezado con cacheo. De modo que muchos seguidores rojiblancos tardaron bastante en llegar a la tribuna asignada, escuchando desde fuera el primer gol... que algunos supimos era local vía telefónica, por alguien que hablaba con un familiar que estaba viendo el partido por televisión. Entrada al campo y una mampara entre la localidad y el campo, me temo que no como detalle con las y los visitantes para guarecernos de las inclemencias del tiempo, en el que fuese estadio de la pulmonía. Bueno, incluso había redes que no llegaron a bajar al completo, solo en un lateral. Así que, ni tan mal.

Por si la espera inicial fuese poca, también nos retuvieron para salir. Todo ello para acabar junto a hinchas locales en el autobús de línea por ejemplo. No sé qué pensaría el chaval pucelano rodeado de rojiblancos de la espera, la separación y esas cosas. Al menos la hinchada rojiblanca se tomó a broma el asunto de la espera posterior, con gritos del tipo "queremos salir de este futbolín". A todo esto, la presencia policial (que también se dejaba notar por la plaza Mayor) hasta tranquila.

Animación en la grada, pero acabaré dando la razón a mi tocayo Fernández de Gamboa, que hay que redefinir los cánticos. Más allá de los gritos, incluso algunos fuera de lugar a mi entender (si son de esos de tono político pero al revés seguro que más de uno y más de una se mosqueaba) sorpresa de que se cante el himno casi completo, medio Ikusi Mendizaleak, la marcha de Aida y poquito más (lo del ritmo, respetar los puntillos y no hacer glissandos ya sería para nota). Hasta llego a añorar el "arriba, arriba" en  una versión más futbolera años 80 renovada (con Susa, Herrera y Aduriz como protagonistas, pongo por caso) que petardera y revolucionaria.

En la rivalidad de gritos entre las aficiones, un personaje compartido pero con distinto punto de vista. Claro que si los que los de apoyo son de la hinchada rival me parece que el chaval tendría que pensárselo mejor ¿no?  Salvo que los vallisoletanos se refiriesen a Joseba, Llorente, claro. Y llegados al temita, y como no vi el partido por la televisión  ¿hubo comentarios sobre Toquero, quien estuvo calentando casi toda la segunda parte sin salir a jugar? Ah, también hubo gritos de "recuerdo" al otro Fernando y de apoyo a Bielsa.

El césped no estaba muy bien... claro que solo había tres personas retocándolo en el descanso. Eso sí, en Pucela tienen mascota, que no le pega mal a la pelota por cierto. Debe ser que pese al disfraz, moverse y darle a la bolita ayuda a combatir el frío en el descanso.

La noche confunde un poco, aunque esté ese dicho de los gatos; "¿quién sale, Ramalho?" pregunta uno. Pues no, iba de albivioleta y pantalón blanco y se trataba de Manucho. Como para que pueda apreciar un penalty o un fuera de juego con esa vista de lince. 




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